El Teatro-Museo Dalí de Figueres ha reabierto sus puertas al público, como cada día, pero hoy con una novedad: uno de los espacios de la Cripta ha sido remodelado para acoger una selección de diez fotografías realizadas por Melitó Casals, «Meli». El día 28 de septiembre se cumplen 47 años de la apertura del museo y se ha querido incorporar al recorrido museístico, por primera vez, unas imágenes tomadas por el fotógrafo y amigo personal Meli, testimonio de excepción de los trabajos de rehabilitación del antiguo teatro municipal de la ciudad.
Las fotografías acompañan a los visitantes para descubrirles al Dalí más próximo y en su Teatro-Museo. Le vemos retocando los plafones del techo del Palacio del Viento, posando bajo la inmensa cúpula reticular o, junto con Gala y Antoni Pitxot, supervisando la instalación de las esculturas de los monstruos “grutescos”, en el patio de butacas. Estas instantáneas son reflejo de la complicidad entre Dalí y Meli. Nos hacen partícipes de un Dalí en plena creación en las distintas etapas de gestación y construcción del Teatro-Museo, un proyecto monumental en el cual el artista se implica sin tregua, especialmente en los años setenta.
Este proyecto expositivo responde a la ingente tarea de reordenación y digitalización que, especialmente durante la pandemia, se ha intensificado en el Centro de Estudios Dalinianos. La Fundación Dalí ya contaba con una amplia representación del fondo Meli relacionado con Salvador Dalí pero ha sido gracias a la colaboración con su hijo, Jordi Casals, cuando, recientemente, se ha podido acelerar la tarea de digitalización de unos 9.000 negativos.
(Cortesía FUNDACIÓ GALA-SALVADOR DALÍ)
